Interacción entre cine y educación

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«Eureka, este año la Navidad será nuestra» (Pesadilla antes de Navidad)


¡Feliz Navidad y próspero 2011!
Nos vemos el año que viene.
Saludos.

“Sus miradas eran la muestra de su deseo de escapar, de construir cabañas a cielo abierto” (Los chicos del coro)

Hoy quiero hablar de un libro muy interesante. Se titula “Cine y ciudadanía. Valores para trabajar en el aula”. Sus autores son un grupo de padres y docentes pertenecientes al Instituto Pedagógico Padres y Maestros. Se publicó en 2009 y pertenece a la Editorial Mensajero.
He llegado a este libro a través de un artículo de Fernando López Bejarano que se publicó en la revista de un instituto madrileño y que me fue enviada por nuestro compañero Juan Carlos. Gracias por la información.

El porque se han decidido este grupo de pedagogos a realizar este libro lo explican ellos mismos: “El cine sigue siendo un agente educador y un reflejo del mundo en que vivimos. Desde sus inicios ha tenido ese carácter moralizante y transformador gracias a su enorme poder de difusión. Al igual que el teatro y la televisión, devuelve al espectador la imagen de una sociedad en continuo movimiento, donde se ponen de manifiesto las grandezas y miserias del ser humano”.

En el libro se utilizan diferentes películas como recursos educativos en el aula para enseñar valores. Los temas que se analizan son:
– Derechos humanos. Sólo se es ciudadano cuando se practica la ciudadanía.
– Democracia de derechos, democracia de deberes: de la tiranía a la participación ciudadana.
– Construir la paz: cultura de guerra, cultura de paz.
– La sostenibilidad: el futuro de la Tierra en nuestras manos.
– Llegar a ser ciudadanos: pautas para la convivencia.
– Nos relacionamos: la necesidad del grupo.
– La interculturalidad: diálogo para una sociedad plural.
– La igualdad del hombre y la mujer: hábitat para la convivencia de género.
– Convivencia escolar: comunicarse mejor es convivir mejor.

Todos ellos son materias transversales de las asignaturas de Secundaria y por lo tanto de Tecnología. ¿Pensáis que se podría aplicar en una clase de Tecnología este método?
Antes de que contestéis os cuento cómo está estructurado el libro. Todas las unidades tienen el mismo esquema. Una introducción donde se explican los problemas y las cuestiones realmente importantes relacionadas con el tema. A partir de estas preguntas se plantean actividades de debate y exposición de los puntos de vista de los alumnos después del visionado de pequeñas secuencias de diferentes películas. Además de incluirse como actividad la proyección y el análisis más profundo de dos películas por capítulo.
Para elegir los diferentes films que se incorporan en las distintas unidades se han seguido tres criterios:
– Actualidad. Para que a los alumnos les sea más sencillo acercarse a ellas, ya que es el mundo en el que viven.
– Variedad. Para poder acercarse a diferentes tipos de personas y poder abarcar el tema desde diferentes aspectos.
– Unidad. Intentar que no quedaran deslavazadas, que todas juntas formen un conjunto compacto.

Algunas de las películas que se sugieren en este libro son:
• Habana Blues. Dir.: Benito Zambrano. España-Francia-Cuba (2005)
• Babel. Dir.: Alejandro González de Iñarritu. EEUU (2006)
• Persépolis. Dir.: Vincent Paronnaud / Marjane Satrapi. Francia (2007)
• Quiero ser como Beckham. Dir.: Gurinder Chadha. Reino Unido-Alemania-EEUU (2002)
• Ser y tener. Dir.: Nicolas Philibert. Francia (2002)
• Diarios de la calle. Dir.: Richard LaGravenese. EEUU (2007)
• Feliz Navidad. Dir.: Christian Carion. Francia (2005)
• This is England. Dir.: Shane Meadows. Reino Unido (2007)
• Ciudad de Dios. Dir.: Fernando Meirelles. Brasil (2002)
• Diamante de sangre. Dir.: Edward Zwick. EEUU (2007)
• El odio. Dir.: Mathieu Kassovitz. Francia (1995)
• Vete y vive. Dir.: Radu Mihaileanu. Francia (2005)
• Los chicos del coro. Dir.: Christophe Barratier. Francia (2004)
• Pequeña Miss Sunshine. Dir.: Jonathan Dayton, Valerie Faris. EEUU (2006)
A mi se me ocurriría utilizar por ejemplo “Diamante de sangre” para hablar del medio ambiente y de lo que puede ocurrir si destruimos nuestros recursos naturales. Y tiene mucho que ver con nuestra asignatura. ¿A vosotros?

Respecto a la dificultad del lenguaje cinematográfico los autores del libro explican: “Enseñar a los jóvenes a ver, a entender y a sentir el cine es un objetivo didáctico de gran importancia. Para que puedan construir valoraciones críticas sobre los mensajes que reciben y sepan trasladar sus experiencias emocionales a la vida real en forma de compromiso en la acción.” Es parecido a algo que os comentaba en mi post inaugural. Del cine se pueden sacar muchas cosas.

Para terminar os quiero dejar con el tráiler de una de las películas de la lista: “Persépolis”. No conocía este film pero investigando para hacer esta entrada lo he visto y me ha parecido maravilloso.

“Los alumnos pueden ser difíciles, pero son geniales” (La clase)

Hoy os voy a hablar de una película que no había visto, pero que para hacer los trabajos de la asignatura de “Aprendizaje y desarrollo de la personalidad” nos hacía falta ver. Es “La clase” de Laurent Cantet. Película francesa del 2008 que fue Palma de Oro en el Festival de Cannes de ese año. Y fue presentada por la Academia Francesa de Cine para los Oscar del año 2009, siendo elegida entre las cinco nominadas, pero siendo derrotada contra todo pronóstico por la japonesa “Departures”.
Para el trabajo de observación de los elementos que entran en juego en una clase que os comentaba de la asignatura del Master es perfecta, puesto que en realidad son momentos de clases casi reales. Y digo casi porque esta película está basada en una novela de François Begaudeau titulada como la película (“Entre les murs” en francés). Este hombre es periodista y escritor. Fue profesor de secundaria en varios centros. Además es el profesor-protagonista de esta película. Todo esto era desconocido para mí cuando vi la película, pero me parecía todo el tiempo un “falso” documental. Es tremendamente real en todo lo que cuenta y en como lo cuenta.

La película es un curso entero en el que suceden cosas, la principal es qué clase de relaciones se establecen entre unos alumnos de 4º de unos 13-14 años (equivalente a un 2º de ESO en España) y su profesor de lengua francesa. Y de manera un poco menos directa de cómo está organizado el centro escolar, sus profesores, sus equipos directivos y sus normas.
Tengo que confesar que al principio tenía mis dudas acerca de si la forma de educar de este profesor era la correcta. No sé que opinaréis los que la hayáis visto. Yo estaba acostumbrada a recibir unas clases en mi época de instituto muy distintas a éstas que aparecen en la película. Pero a medida que transcurría empecé a entender cómo estaba intentando acercarse a ellos, cómo alimentaba su espíritu crítico, como acercaba los conocimientos teóricos a la vida cotidiana. En definitiva cómo quería enseñar. Aunque claro está, no es perfecto, ni mucho menos.
Os voy a ir poniendo algunas partes de alguna secuencia para que veáis qué clase de alumnos tiene y qué tipo de profesor es. En la mayoría de las secuencias, los alumnos ponen en tela de juicio alguna de las enseñanzas o mejor dicho las metodologías de dichas enseñanzas. En este primer ejemplo, el profesor ha escrito en la pizarra un ejemplo utilizando un nombre, Bill. Dos de sus alumnas le replican por no utilizar un nombre que les sea más cercano. Es una clase multicultural, multiétnica, multireligiosa. Veréis cómo les contesta el profesor, pidiéndoles su opinión y explicándoles porque lo hace.

En este segundo clip vemos al profesor intentando explicar el porque les ha pedido como trabajo un autoretrato de cada uno de ellos. Y cómo ellos explican porque no quieren hacerlo y como sus vidas no les parecen nada interesantes. Es un claro ejemplo en el que el profesor está intentando estimularles y hacerles creer un poco más en ellos y todo lo que pueden aportar. Les enseña contenidos, capacidades y actitudes. Se interesa por sus problemas.

Aunque los alumnos le replican continuamente, les escucha, siempre y cuando no abusen y no se dediquen a insultarse. Cuando esto pasa es muy directo resolviendo los conflictos, hasta que se le escapa de las manos… No os voy a contar más por si queréis verla. El final a mi me dejó helada.

¡Qué difícil es la labor del docente! Viendo esta película me ha entrado un poco de miedo. Aunque como dice el título de esta entrada y uno de los profesores justo al principio de la película: “Los alumnos pueden ser difíciles, pero son geniales”.

“El cine, si se hace bien, regala pequeños fragmentos de vida que nunca olvidarás” (Amarcord)

El otro día curioseando por internet me encontré con esta página de la asociación FAD (Fundación de Ayuda contra la Drogadicción) en la cual se dan una serie de pautas y programas para la utilización del cine como forma de inculcar valores a los chicos, en definitiva tenerlo como una herramienta adicional y muy útil en la educación.

http://www.fad.es/contenido.jsp?id_nodo=51

Para justificar su uso utilizan varios motivos. El primero que se nos ocurre es lo habitual que resulta para la gente joven entender el lenguaje audiovisual. No sé si alguna vez habéis tenido alguna experiencia de gente mayor que viendo la televisión y seleccionando imágenes al azar (cambiando rápido de canal, por ejemplo) no eran capaces de distinguir si la imagen que estaban viendo pertenecía a una película o una serie, a un anuncio o un programa de entrevistas. El porqué es sencillo. Aunque la televisión lleva ya mucho tiempo, ellos no han crecido con ella, no tienen una lectura rápida, les cuesta hacerse a lo que están viendo y sobre todo les cuesta interpretarlo.
Así que a simple vista parece un medio adecuado para acercarse a los chicos y contarles de una manera amena algo que deben formar parte de su forma de vivir. Crear gracias a ellos conductas correctas.
Claro que no vale cualquier película. Hay que elegir entre la gran oferta que hay, las más apropiadas por su realización y sobre todo por su temática. Pueden ser largometrajes, cortometrajes, documentales o cualquier pieza que pueda aportar a los chicos algo que les haga pensar. Es decir que el valor no se lo damos a la película en si, lo importante son las reflexiones de los alumnos y las conclusiones a las que llegan. Si comparan su comportamiento o su forma de ser con alguno de los personajes (se sienten identificados con ellos), si piensan que pueden mejorar en algo, o incluso si hay algo en la película que les resulta inapropiado.
Aparte de enseñar valores o actitudes creo que también se pueden utilizar para aportar conocimientos meramente cognitivos o utilizarlos como introducción a algún tema a tratar en clase.
En próximas entradas os pondré un ejemplo de una película realizada con este fin (educar en valores), pero de momento os dejo un cortometraje muy gracioso que enseña la evolución de la tecnología y que podría valer como introducción de una clase de manera que se empiece con una sonrisa que siempre está bien.

“Hagas lo que hagas ámalo, como amabas la cabina del Paradiso cuando eras niño” (Cinema Paradiso)

Quiero empezar este blog hablando de la educación fuera de las escuelas. No sólo se enseña y se aprende en el colegio o instituto, esto es obvio.  Y lo primero que se nos ocurriría pensar es que en los hogares es dónde más se puede aprender,  sobre todo actitudes. Está claro que los padres son los primeros educadores. Pero el entorno también puede tener un papel muy importante.

Para ello voy a utilizar la película “Cinema Paradiso”. Si hay alguien que no la haya visto se la recomiendo. En ella se establece un lazo indestructible entre Totó (el niño) y Alfredo (el proyeccionista del cine del pueblo). Y ese lazo está lleno de enseñanzas recíprocas, tanto técnicas (Alfredo enseña a Totó a utilizar el proyector) como de actitudes, de comportamientos y de formas de ver la vida, claro está, utilizando el cine como telón de fondo.

“Cinema Paradiso”, película italiana, fue rodada en 1988 por Guiseppe Tornatore. Y recibió el Oscar a la mejor película de habla no inglesa en 1989 entre otros muchos premios. El tema principal de la película es la magia del cine, y como a través de él se puede entender el mundo. En definitiva lo que yo planteaba en mi primera entrada, por eso he elegido esta película y este tema para empezar. Está ubicada en un pueblecito de Sicilia y la historia comienza en los años 40.

El niño (Totó) a través de las películas desarrolla una gran imaginación y una curiosidad que no  se detendrá ante nada. Se inventará mil excusas y aventuras para conseguir saber lo que quiere. Tanto la imaginación, como la curiosidad son actitudes deseables para la educación de un niño. Y en las escuelas se deberían fomentar.

Hay que tener en cuenta el tiempo en el que se desarrolla la película. Empieza en los años 40. En esa época no existía la televisión, ni por supuesto internet. Para ellos el cine era prácticamente su Web 2.0, se informaban y se comunicaban. La mayoría de ellos eran analfabetos, pero gracias a lo que veían estaban en contacto con la realidad de fuera de su entorno. Además de poder desarrollar otros aspectos importantes, como poder expresar sus sentimientos. Así mismo la educación en las escuelas no tenía nada que ver  con cómo es ahora. En ella los profesores “corregían” a sus alumnos con golpes e insultos. Cosa que no ayuda mucho a nuestro protagonista a avanzar en la vida.

En medio de todo esto, Totó conoce a Alfredo. El vínculo que se genera, del que hablaba antes, se debe a la mutua ayuda que se prestan en varias situaciones. Pero lo que descubre Alfredo es que Totó ha aprendido muchas cosas de la cabina de proyeccionista simplemente mirando. Es decir, Totó ha aprendido muy rápido porque el tema le apasiona. Cuanto más te gusta algo más fácil es de aprenderlo. Pero además de enseñanzas teóricas Alfredo le enseña a Totó cómo es la vida. Y para ello utiliza multitud de referencias cinematográficas. Le recomienda que siga en la escuela y que se marche del pueblo para poder avanzar. Todo esto dicho por un hombre casi sin estudios. Pero con mucha experiencia vital, que sabe transmitir muy bien a su “alumno”. Incluso le llega a decir que: “…la vida no es como la has visto en el cine, la vida es más difícil…”

 

Es una película que a quién sienta pasión por el cine, no le va dejar indiferente. Te remueve y tiene un final muy expresivo, dónde todas las “enseñanzas del profesor” quedan reflejadas. Os voy a dejar ese final. Aunque no lo entendáis del todo porque no habéis visto la película, seguro que no os deja indiferentes. Porque está lleno de magia, como el propio cine. Además tiene una pieza musical de Ennio Morricone (compositor de la banda sonora de la película) que seguro que os suena y que es muy emotiva.

 

Espero que os hayan entrado ganas de verla si todavía no la conocéis o de verla de nuevo si ya la habéis visto alguna vez. Yo cada vez que la veo acabo llorando, no de tristeza, sino por los sentimientos que saca de mí.

«Enséñame a olvidarme de pensar»(Romeo & Julieta)

Cuando el profesor de «Aplicación de plataformas online y web 2.0 para tecnología» nos pidió como trabajo de la asignatura la creación de un blog me puse a pensar sobre que tema podría escribir yo. Con lo que me cuesta expresarme. Así que pensé que lo mejor sería hablar de algo que me gustara.

El cine desde siempre ha sido algo importante en mi vida. He aprendido muchas cosas de él. La principal, a ver el mundo con distintos ojos. Hay gente que opina que el cine es «mentira» y aunque lleven razón porque en algunos casos es ficción, aporta mucho de realidad en lo que cuenta, sentimientos, actitudes, comportamientos… En definitiva y de eso estoy segura enseña.

Así que voy a dedicar mi blog al cine y la enseñanza. La relación que existe entre ellos. Como ve el cine la enseñanza, como se pueden enseñar valores desde el cine, o simplemente comentarios que se me ocurran que hilen estos dos mundos tan apasionantes para mi.

Espero que os guste y que participeis activamente en él.